Quito, 3 abr (EFE).- El Programa Euroclima+, desarrollado por la Unión Europea (UE), implementará más de 50 proyectos encaminados a la lucha contra el cambio climático en Latinoamérica antes de finales de este 2019.
Así lo establecieron los más de 70 expertos de 18 países latinoamericanos que se reúnen estos días en la capital ecuatoriana para abordar las estrategias de financiación a futuro de este programa, que contará con una inversión de 88 millones de euros (casi 100 millones de dólares).
Un dinero que provendrá de cinco agencias europeas, entre ellas la Cooperación Española (Aecid), la Agencia Francesa para el Desarrollo (AFD) y la Cooperación Alemana.
La agencia española financiará proyectos en tres de los siete ejes que componen el proyecto, según explicó a Efe su responsable de Programas, Juan Enrique García.
"Ha sido pertinente y una oportunidad el sumarnos a este esfuerzo europeo para seguir apoyando a los países de la región en sus esfuerzos de lucha contra el cambio climático", afirmó García.
Los ejes en los que actúa Aecid se relacionan con la gestión de riesgos, eficiencia energética y gestión del agua, y resiliencia urbana, a través de diversos proyectos que ya están en marcha y de otros que esperan desarrollar en breve.
Tres de ellos se implementan a nivel regional para combatir la sequía en Centroamérica, las consecuencias del exacerbado fenómeno "El Niño" en los países sudamericanos del Pacífico y las inundaciones en Sao Paulo (Brasil) y Córdoba (Argentina).
Por otro lado, Costa Rica se ha convertido en un modelo regional con su ambicioso proyecto que pretende la "descarbonización" del país.
Así lo explicó a Efe la subdirectora costarricense de la Dirección de Cambio Climático, Patricia Campos, quien resaltó que la nación está dispuesta a convertirse en un "laboratorio" que ayude a "gestar proyectos que puedan ser replicables y compartidos por otros países".
"En este momento, una de las 'ventajas' de los efectos del cambio climático es que ha permitido que el ser humano entienda que no existen fronteras", indicó.
Esta política de descarbonización, de diez ejes, pretende reducir, de manera transversal, el uso de combustibles fósiles en el país, relacionados con la movilidad sostenible y el transporte público, privado y de carga eficiente, la energía renovable, un sector primario y secundario con bajas emisiones, la gestión de territorios con soluciones basadas en la naturaleza y la administración de los residuos sólidos.
"Se trata de un modelo de país, de que todos los costarricenses salgamos beneficiados por esta implementación", agregó Campos.
Euroclima comenzó su funcionamiento en el año 2010 con un presupuesto de solo cinco millones de euros (5,6 millones de dólares) y, en su tercera fase Euroclima+, se ha constituido en un apoyo continuo a Latinoamérica.
"Este programa beneficia a 18 países de la región, que es muy diversa y muy vulnerable también al cambio climático, y por eso pensamos que necesita apoyo en el tema de la adaptación, pero también del crecimiento bajo en carbono", señaló a Efe la responsable de la Dirección General de Cooperación Internacional y Desarrollo de la Comisión Europea para el programa, Catherine Ghyoot.
La alta funcionaria europea matizó que, aunque este es un programa "muy bonito" que puede obtener resultados concretos y positivos en la lucha contra el cambio climático, también es "muy complejo" por la diversidad de actores que participan en él.
Finalmente, destacó que estos 50 proyectos, todos ellos propuestos por los propios miembros, "reflejan bastante bien las diferentes prioridades" que tienen cada país. Sociedad