Bruselas, 7 jun (EFE).- Líderes de gobiernos de África, América Latina, Europa y representantes de la ONU colocaron hoy la lucha contra el cambio climático en el centro de la estrategia para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Naciones Unidas para 2030.
La undécima edición de los Días Europeos de Desarrollo, un foro que se celebra hoy y mañana en Bruselas, sirvió de punto de encuentro para que presidentes, primeros ministros y líderes a nivel mundial reiteraran el compromiso global con el Acuerdo de París (2015) sobre el cambio climático, en respuesta a la salida de Estados Unidos del mismo.
"No existe un futuro en el que mantengamos nuestros empleos sin preocuparnos por el planeta. Esto no funciona así, por mucho que algunos lo crean", advirtió la primera ministra de Noruega, Erna Solberg, en una referencia velada a la opinión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
En su discurso para anunciar la salida de Washington de este pacto, Trump centró sus argumentos en cómo los objetivos de reducción de emisiones contaminantes del Acuerdo de París podría minar el potencial de crecimiento económico de su país.
Diversos líderes, como el presidente de Guayana, David Granger rechazaron hoy esa idea.
"Invertir en el medioambiente significa invertir en el futuro, en la Tierra y en la eternidad. No hay nada más beneficioso económicamente que defender esto", incidió Granger en su discurso de apertura del evento.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, se pronunció por su parte en el mismo sentido y aseguró que la vida "en armonía con la Madre Naturaleza" es la única que conciben los bolivianos para lograr el desarrollo.
"Es evidente que la Madre Tierra puede existir mejor sin el ser humano, pero el ser humano no puede ni podrá vivir sin ella", advirtió Morales, que instó además a la defensa y cumplimiento del Acuerdo de París.
Para la subsecretaria general de la ONU, Amina Mohammed, este foro no debe centrarse en hablar de "la decisión de alguien de salirse de (el Acuerdo de) París", sino que la prioridad debe ser "continuar presionando" para que los países cumplan con sus compromisos.
Los ODS marcados por la ONU para el periodo 2015-2030, que reemplazaron a los Objetivos de Desarrollo del Milenio, conforman una agenda de metas para fomentar el avance de la humanidad de forma sostenible e incluye retos en áreas como el medioambiente, la igualdad y la reducción de la pobreza.
La presidenta noruega recalcó que los ODS deben ser la guía de los esfuerzos comunes para avanzar hacia un desarrollo sostenible y celebró que estas metas aporten un enfoque que interrelacione factores sociales, económicos y ambientales.
En ese sentido, Mohammed apuntó a que uno de los principales pilares en los que se basan los ODS debe ser la concienciación para "invertir en lo intangible", una circunstancia necesaria que es aún un reto para muchos países en vías de desarrollo.
Por su parte, la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, se mostró convencida de que los líderes mundiales "se toman en serio" los ODS y aseguró que su institución les apoyará para que logren alcanzarlos.
Lagarde centró su intervención en la lucha contra la desigualdad de género, un problema que abordaron también muchos de los representantes nacionales que tomaron la palabra, y lo hizo "por ser mujer, porque es un asunto moral y, como directora del FMI, porque es macroeconómicamente relevante".
Aseguró que en regiones de renta baja, una reducción del 10 % en la desigualdad de género podría impulsar el crecimiento económico en un 2 %, lo cual supone "una gran diferencia" a la hora de abordar inversiones masivas.
"Acabar con la desigualdad de género es un impulso macroeconómico triple: refuerza el crecimiento, reduce las desigualdades sociales y ayuda a la diversificación de las exportaciones", agregó.
En este sentido, el presidente de Ruanda, Paul Kagame, señaló que "es difícil imaginar un país próspero en el que no se aproveche el talento de la mujer", mientras que el de Ghana, Nana Akufo-Addo, apuntó al empoderamiento femenino y juvenil como "retos fundamentales" para garantizar el desarrollo de África. Mundo