(Reuters) - El Gobierno de Trump dio el jueves un paso más para revocar la autoridad de California a la hora de establecer sus propias normas para limitar las emisiones de los tubos de escape y ordenar la venta de vehículos eléctricos, al proponer suavizar las normas federales de eficiencia de combustible de la era Obama.
La propuesta para relajar los esfuerzos anticontaminación, presentada a primera hora del jueves, está en línea con la decisión del presidente Donald Trump del año pasado de abandonar el Acuerdo de París 2015, por el que los países se comprometieron a mitigar el calentamiento mundial.
El proyecto del Departamento de Transporte de EEUU y la Agencia de Protección Medioambiental congelaría la normativa de eficiencia de combustible en los niveles de 2020 hasta 2026, y se reduciría considerablemente la exigencia de incrementar el número de vehículos eléctricos.
El Gobierno dijo que la decisión impulsaría el consumo de petróleo de Estados Unidos en alrededor de 500.000 barriles al día hasta la década de 2030, y evitaría 12.700 víctimas de tráfico - o hasta 1.000 al año - al reducir el precio de los vehículos nuevos y animar así a la gente a comprar coches más nuevos y más seguros.
Grupos ecologistas rechazaron el argumento sobre la reducción de muertes por accidentes y dijeron que la propuesta elevaría los precios de la gasolina y daría marcha atrás a uno de los pasos más importantes tomados por Washington para frenar las emisiones de gases de efecto invernadero responsables del cambio climático. También pondrían más vidas en riesgo debido a las emisiones inductoras de asma, dijeron. La propuesta, según el Departamento de Transporte, rebajaría drásticamente los costes regulatorios previstos para los fabricantes de automóviles en 319.000 millones de dólares hasta 2029; reduciría en más de 60.000 millones lo que se esperaba que gastaran General Motors Co (NYSE:GM), Ford Motor (NYSE:F) Co y Fiat Chrysler Automobiles (MI:FCHA) NV para cumplir con las reglas de Obama. Toyota Motor (T:7203) Corp ahorraría 34.000 millones de dólares y Volkswagen (DE:VOWG_p) AG 20.000 millones sobre los costes estimados.
La propuesta, de adoptarse, reduciría drásticamente el número de vehículos que tendrían que ser parcial o totalmente eléctricos para cumplir con los requisitos de emisiones.
La propuesta de Trump calculó que con los requisitos de la era Obama, alrededor del 70 por ciento de las camionetas tendrían que tener algún tipo de electrificación para 2026, frente a sólo el 1 por ciento según el plan de Trump.