Buenos Aires, 5 de mayo, 2016 (AP). El 30% de los niños argentinos son pobres, de los cuales 1.2 millón viven en extrema pobreza, según un estudio difundido el jueves por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) que evidencia un deterioro de la situación social en Argentina.La organización dijo en un comunicado que entre 3.3 y 4 millones de niños de entre 0 y 17 años padecen múltiples privaciones, de acuerdo a una metodología que no toma en cuenta el consumo o nivel de ingresos para medir la pobreza como los estudios tradicionales sino indicadores de privación en las dimensiones nutrición, salud, educación, acceso a la información, vivienda, protección contra la violencia y el trabajo infantil, entre otras.
A partir de datos oficiales y de organismos privados de 2012 y de 2015 UNICEF estableció que los niños pobres tienen un promedio de 5.7 privaciones entre las 28 posibles.
"Las privaciones en información (acceso a internet, TV, teléfono fijo y móvil, computadora), protección contra la violencia doméstica, salud y el tiempo para jugar son, en ese orden, las más importantes en la Argentina", indicó UNICEF.
Hace poco más de un mes un estudio privado Universidad Católica Argentina (UCA) reveló un fuerte aumento de la pobreza en el primer trimestre del año como consecuencia de la inflación y la caída en la demanda de empleo.
Los expertos coinciden que la pobreza estructural en el país sudamericano empeoró por el estancamiento de la economía en los últimos dos años, pero que se profundizó en los últimos meses por una aceleración de la inflación y una política de ajuste en los gastos del Estado que derivó en miles de despidos de la administración pública y nacional.
En este contexto, los niños que están en la base de la escala social tienen la posibilidad 13 veces más elevada de sufrir privaciones, comparados con aquellos que están en la cúspide de la pirámide social.
Las mediciones oficiales de pobreza e indigencia no se difundirán hasta el segundo semestre del año debido a la intervención del Instituto de Estadísticas y Censos dispuesta por el gobierno de Mauricio Macri para devolverle credibilidad a ese organismo acusado de manipular las cifras durante la anterior gestión de Cristina Fernández (2007-2015).
UNICEF aclaró la cifra verdadera (de pobreza infantil) "podría ser aún más elevada" que la establecida en su estudio.
